

Al finalizar el ciclo de amasado, el volcador facilita la dura tarea de vaciar la artesa y transportar la masa. El trabajo se reduce a la simple pulsación de un interruptor, y el volcador eleva la amasadora para que la masa caiga directamente en la tolva de la pesadora.
El volcador se fabrica a medida de las necesidades de la panadería y de las máquinas que se utilizan, y se adapta tanto a la amasadoras espiral como a la amasadora de brazos verticales